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miércoles, 20 de noviembre de 2013
miércoles, 31 de julio de 2013
EL HOMBRE QUE PREFIERO SER
Existiendo tantas formas de ser, existiendo tantas formas de vivir, y viendo las formas que escogen la mayoría, me extraña haber escogido lo que escogí...
cuando los patanes se llevan a todas las chicas...
cuando las chicas lloran por como les tratan los patanes...
cuando los patanes dicen perdón sin sentirlo...
cuando las chicas se tragan ese perdón y lo atesoran como si fuera real...
ahí apareces tu, el amigo dueño de aquel hombro en el que las lagrimas de nuestras necias damas son derramadas sin parar...
ahí estas tu el caballero...
ahí estas tu, el que abre la puerta a cualquier amiga o le cede su asiento a una mujer...
ahí estas tu, el chico al que todos molestan, por ser decente...
ahí estas tu, el único suficientemente hombre para no querer hacer nada con tu amiga que tiene pareja...
ahí estas tu, el único suficientemente hombre para respetar a tu pareja y no engañarla con nadie...
la vida de los patanes es mas simple, no se si les llene lo que hacen, no se si les desgarre el alma saber que una mujer llora por ellos...
creo que los entiendo, creo saber porque lo hacen...
y pese a sentir que es mas fácil su forma de ser...
...tu eres el caballero, tu eres quien sabe que significa la lagrima de una mujer...
tu eres quien sabe que al fin y al cabo, es mejor así...
martes, 23 de julio de 2013
EN UNA HISTORIA, LO QUE MENOS IMPORTA, ES EL FINAL
Una frase que salió de la nada, sin pensarlo, y que luego de una semana de analizarla, sigo sin encontrarle fallas.
En una historia, siempre lo menos importante es el final, ya sea en la vida, en los libros, el cine o la música. Siempre lo que menos importa, es el final.
Con una historia puedes reír, llorar, sufrir, pensar y viajar a sitios que nunca imaginaste, ya sea esta ficticia o real.
En un libro te enamoras de la historia, amas cada letra que la compone, vives dentro de él y el libro cobra vida en ti, y lo que importa es lo que pasa ahí, no como termina; De hecho, el final siempre es triste, siempre termina mal, porque pese a que los personajes pueden obtener su "vivieron felices para siempre" tu no lo obtendrás, tu corazón termina destrozado por esa inevitable separación de eso que, al menos por un momento, amaste y convertiste en tuyo, ya no eres parte de la vida de los personajes, esa vida que por momentos se volvió la tuya mismo. Tu no estas incluido en el vivieron juntos para siempre.
Y hablando del "vivieron felices para siempre", me parece que es el peor agravio que un escritor puede cometer frente a su escrito, su historia, ya que eso elimina toda posibilidad de aventuras y la vida misma.
Porque en una historia, sea cual sea, el vivieron felices para siempre es sinónimo de falta de vida; cuando conoces a alguien, no esperas que eso ocurra (o al menos eso crees, pero no lo deseas), lo que en realidad quieres son aventuras, de cualquier tipo y forma, quieres reír y llorar, sufrir y sentir. Sentir justamente es la palabra que más importa y más trasciende, ya que en esta, se resume la vida misma, las aventuras, los amigos y el amor.
Cuando se acaba una historia, dejas de sentir. No existe manera de conseguir un final feliz, ya que siempre, tanto en la vida o en un libro, el final implica la separación. Lo feliz de la historia es el contenido, es la aventura, todo lo que hiciste, y todo lo que esta te hizo sentir, y por eso, amigos míos, les digo con total confianza y sinceridad, que en una historia, SIEMPRE, lo que menos importa, es el final.
*Este artículo es de mi autoría y que no necesariamente refleja las opiniones de todos los que conforman este blog.
lunes, 22 de julio de 2013
MISS PEREGRINE'S HOME FOR PECULIAR CHILDREN
MISS PEREGRINE'S HOME FOR PECULIAR CHILDREN
Como
mi primer aporte a este blog he decidido que haré una breve reseña a un
libro que he leído recientemente, Miss Peregrine’s Home For Peculiar
Children, escogí este libro porque no es una novela como las que estoy
acostumbrado a leer. He tratado de hacer esto de una forma que me
permita expresar lo que sentí al leer este libro, pero sin arruinarles
la historia para que sean ustedes mismo quienes descubran lo que sigue.
La novela se centra en la vida del adolescente Jacob, un adolescente
poco común y al mismo tiempo tan común que pasa desapercibido, que tiene
un solo amigo en toda su vida; el abuelo de Jacob solía contarle
historias asombrosas de su juventud, historias acerca de como vivió en
un orfanato y de los niños que vivían con el, niños muy peculiares con
extraños poderes, una podía crear fuego con sus manos y otro era
invisible, y así muchos otros; historias que Jacob escuchaba y creía con
vehemencia. Todo cambia cuando su abuelo muere en circunstancias muy
extrañas, que marcan a Jacob de forma que no lo puede superar durante
mucho tiempo, esto lo lleva de psiquiatra en psiquiatra, y torna su vida
en una completa depresión, hasta que decide realizar un viaje a la isla
donde se encuentra el orfanato en el que vivió su abuelo, y encuentra
algo más que ruinas.
Realmente al comienzo me aburrí, siguiendo
a Jacob en su lenta recuperación de la muerte de su abuelo, pero luego
todo da un giro de 180 grados, se vuelve emocionante, vibrante, lleno de
vida, dejándote ávido de más, de seguir leyendo para saber que es lo
que sigue, por descubrir que es lo que el tímido Jacob hará y como su
vida cambiará para siempre, de ver como su vida se vuelve nada frente a
lo que acaba de descubrir, y que en un principio se resiste a creer.
Lo que mas resalta de este libro es la serie de viejas fotografías que
acompañan la historia y se adaptan perfectamente a esta, fotografías
nada comunes, que a pesar del poco color que poseen dan vida a la
novela, fotos tan extrañas que solo pueden ir con esta novela, fotos que
se destacan porque no te esperas que alguien se haya dado el tiempo de
tomar una fotografía de ese tipo, pero lo más destacado es como el autor
da continuidad a la novela de tal modo que parece que las fotos se
hubieran hecho para el libro. De acuerdo al autor, encontró las
fotografías en pequeñas ventas, partes de colecciones de muchas personas
que dedicaron mucho tiempo a recolectar antiguas fotografías que
guardan cada una una su propia historia.
La originalidad de la
historia, junto con las extrañas fotografías, nos acercan a la novela y
nos invita a vivir y ser uno más de estos niños peculiares, a seguir
cada uno de los giros de la vida del protagonista. Me parece muy extraño
que cuando lo buscas en internet lo catalogan como una novela de
terror, pero mientras la lees descubres toda una realidad distinta, que
incluye viajes en el tiempo, amores prohibidos, y monstruos llenos de
ambición. Toda una mezcla de la realidad de un adolescente con
problemas, y ciencia ficción cargada de originalidad, muy bien lograda.
El estilo del autor me parece muy soberbio, serio y a la vez divertido,
no escatima en letras a la hora de describir los escenarios y las
situaciones, dándole un realismo que te permite ver el desenlace como si
estuvieras ahí, junto a los personajes, y ser uno más del grupo.
Me parece que esta novela alcanza un alto grado de realización; el
cuidado en los detalles, personajes que atraen y se destacan cada uno a
su manera, el ritmo, los pequeños giros que permiten seguir la historia
con un fotografía, todo se une para dar paso a una trama agradable,
llena de aventuras y mundos por descubrir. Es la primera novela del
autor Ranson Riggs, dirigida a un público adolescente, aunque eso no
quiere decir que no podamos todos disfrutar de su lectura. Para mi, un
gran recomendado para aquellos que disfrutan de este hobby tanto como
yo. Espero con ansia la continuación de esta serie.
jueves, 13 de junio de 2013
¿Feo o Mala Labia?
¿Feo o Mala Labia?
El poder de la palabra maquillada.
La comunicación es una facultad muy interesante en la condición del ser humano. Ha servido para construir puentes entre las personas, convirtiendo en una forma de compartir y de “entendernos”. Se ha tergiversado el sentido de este tipo de comunicación, sin embargo; nos hemos quedado con un tipo de comunicación en la que el orador reza y el oyente “escucha” embelesado.
Las personas hablamos para expresarnos; para poner en perspectiva las cosas que nos gustan y que no nos gustan, para darnos a conocer, en fin, para muchas cosas. En los tiempos en los que vivimos, la palabra se ha ido deteriorando tanto que es poco común oír la frase “hombre de palabra”; solo quedo para ser recordada de vez en cuando en alguna película del oeste, entre los sonidos de balas y el whiskey regándose en las cantinas… Dejando a un lado las divagaciones (y el instintivo deseo de un buen vaso de escoces), hablemos del poder de la palabra hoy en día. Si, tal vez la gente habla menos por el boom del internet, las redes sociales, el celular, bla, bla, bla… Pero para ilustrar mi punto, usemos el mejor ejemplo que puede haber. La política.
Una de las principales cartas de presentación en la política es una buena “labia”, como le decimos en Ecuador; “Estas al otro lado con buena labia”, para completar las frases de mi país. ¿Qué es esto de la labia? No es lo mismo para un candidato decir que construirán 500 casas con prestamos del 30% financiando a 5 años, que decir que se harán espectaculares viviendas en sectores paradisiacos de nuestra patria, acomodados para su compra con un préstamo comodísimo y a un plazo nunca antes visto. Vemos que la primera frase muestra la pintura tal y como es; la segunda la maquilla de forma estratosférica sin tomar en cuenta que los datos que da son… bueno, no da ningún dato. Pero no es difícil a quien le cree mas la gente.
Esta forma de expresión no solo sirve a nuestros amigos involucrados en asuntos políticos; se puede aplicar empezando con la señora de la comida para conseguir una porción extra o hasta en las relaciones personales, para hacer que un par del sexo contrario caiga rendida (o rendido en caso de las señoritas) a nuestros pies; todo con la misma efectividad. No olvidemos uno los principios básicos de la comunicación entre dos personas: es bidireccional. Esto significa que hay un orador y un oyente; el primero expone y el segundo “entiende”. La comunicación bidireccional debe provocar eso en el oyente, ya que el orador se dirige a un ente capaz de distinguir entre la verdad y la mentira, la realidad y la ficción, lo probable y lo improbable. Usar aquellos términos de mas en una conversación ayudan al orador a maquillar de tal forma sus intenciones que quizás el oyente nunca se dio por enterado. En fin, la labia llegaría a ser una sombra para los ojos de la palabra, una base para la cara del despiste y un pintalabios para los labios que dicen todo y nada a la vez.
A pesar de todo, es fundamental que en la vida aprendamos a discernir entre líneas, y ver la verdad a través de la cortina de las palabras. Quizás lo que encontremos no sea lo que realmente pensábamos.
El poder de la palabra maquillada.
La comunicación es una facultad muy interesante en la condición del ser humano. Ha servido para construir puentes entre las personas, convirtiendo en una forma de compartir y de “entendernos”. Se ha tergiversado el sentido de este tipo de comunicación, sin embargo; nos hemos quedado con un tipo de comunicación en la que el orador reza y el oyente “escucha” embelesado.
Las personas hablamos para expresarnos; para poner en perspectiva las cosas que nos gustan y que no nos gustan, para darnos a conocer, en fin, para muchas cosas. En los tiempos en los que vivimos, la palabra se ha ido deteriorando tanto que es poco común oír la frase “hombre de palabra”; solo quedo para ser recordada de vez en cuando en alguna película del oeste, entre los sonidos de balas y el whiskey regándose en las cantinas… Dejando a un lado las divagaciones (y el instintivo deseo de un buen vaso de escoces), hablemos del poder de la palabra hoy en día. Si, tal vez la gente habla menos por el boom del internet, las redes sociales, el celular, bla, bla, bla… Pero para ilustrar mi punto, usemos el mejor ejemplo que puede haber. La política.
Una de las principales cartas de presentación en la política es una buena “labia”, como le decimos en Ecuador; “Estas al otro lado con buena labia”, para completar las frases de mi país. ¿Qué es esto de la labia? No es lo mismo para un candidato decir que construirán 500 casas con prestamos del 30% financiando a 5 años, que decir que se harán espectaculares viviendas en sectores paradisiacos de nuestra patria, acomodados para su compra con un préstamo comodísimo y a un plazo nunca antes visto. Vemos que la primera frase muestra la pintura tal y como es; la segunda la maquilla de forma estratosférica sin tomar en cuenta que los datos que da son… bueno, no da ningún dato. Pero no es difícil a quien le cree mas la gente.
Esta forma de expresión no solo sirve a nuestros amigos involucrados en asuntos políticos; se puede aplicar empezando con la señora de la comida para conseguir una porción extra o hasta en las relaciones personales, para hacer que un par del sexo contrario caiga rendida (o rendido en caso de las señoritas) a nuestros pies; todo con la misma efectividad. No olvidemos uno los principios básicos de la comunicación entre dos personas: es bidireccional. Esto significa que hay un orador y un oyente; el primero expone y el segundo “entiende”. La comunicación bidireccional debe provocar eso en el oyente, ya que el orador se dirige a un ente capaz de distinguir entre la verdad y la mentira, la realidad y la ficción, lo probable y lo improbable. Usar aquellos términos de mas en una conversación ayudan al orador a maquillar de tal forma sus intenciones que quizás el oyente nunca se dio por enterado. En fin, la labia llegaría a ser una sombra para los ojos de la palabra, una base para la cara del despiste y un pintalabios para los labios que dicen todo y nada a la vez.
A pesar de todo, es fundamental que en la vida aprendamos a discernir entre líneas, y ver la verdad a través de la cortina de las palabras. Quizás lo que encontremos no sea lo que realmente pensábamos.
sábado, 8 de junio de 2013
¿Discriminación o sentido común?
La obesidad como tema de debate
Hoy por hoy, sobre todo en los
países del primer mundo, existe un sedentarismo muy acentuado, debido en parte
a la proliferación de un estilo de vida con ocupaciones más estáticas frente a las
que existían en el pasado, los niños ven televisión o juegan videojuegos en
lugar de salir a correr o manejar bicicleta, los adultos son cada vez más
necesitados en trabajos de oficina frente a los trabajos en el campo o de
campo. Esto como consecuencia visible, tiene un aumento considerable en la
cantidad de personas con problemas de peso, ya sea un simple sobrepeso, o
incluso llegar a la obesidad mórbida.
Esto, en la sociedad, provoca
ciertos enfrentamientos entre dos distintas tendencias, principalmente en lo
que el uso de espacios físicos. Para explicarme mejor, voy a ejemplificarlo,
van dos personas a un estadio a presenciar un concierto, en las gradas, los
puestos están delimitados, y suelen tener un ancho de 45 cm. Aproximadamente;
pero una persona obesa ocupa mucho más espacio que los 45 cm delimitados,
dejando sin su lugar a nuestro segundo personaje. Entonces surge la pregunta,
¿Esta persona debe pagar el doble, que una persona promedio al ocupar dos
espacios? ¿Es justo que pague el doble, sabiendo que se venden entradas para
las personas, sin importar el físico-raza-sexo? ¿Es justo para nuestro segundo
amigo incomodarse, o incluso quedarse sin lugar debido a la persona con
problemas de peso?
Aunque los espacios físicos
públicos están destinados para una persona más allá de sus características
físicas, no hay como dejar de reconocer, que, sobre todo en los sitios donde se
paga para obtener un lugar, las personas que sufren de sobrepeso ocupan el
doble de espacio, por tanto, se podría decir que es justo que paguen el doble.
Este debate se podría centrar en si el vendedor del espectáculo vende el
espacio o el ingreso de la persona.
Lo más importante a considerar,
es la diferencia marcada que existe entre este tipo de “discriminación” y el
racismo o la xenofobia. En el caso de estos dos últimos tipos de discriminación
la diferencia entre las personas no es más que un accidente genético o
geográfico, en la cual los individuos en si no tienen ninguna injerencia ni
capacidad de tomar decisiones consientes referentes al tema. Además no existe
una diferencia física real, más allá de la de ciertos rasgos o el color de
piel.
En cambio, en su inmensa mayoría,
la obesidad, es una decisión, y si bien puede haber cierta predisposición
genética hacia ella, como ser humano estas en perfecta capacidad de hacer
frente a esto usando distintos medios (Una dieta más sana, medicamentos,
ejercicio o incluso una cirugía). De cierta manera, la obesidad, como
enfermedad tiene características similares a fumar o consumir bebidas
alcohólicas, esta está directamente relacionada con una conducta voluntaria de
la persona, y conlleva graves riesgos para la salud de la misma.
Pero sin embargo, la persona
sigue siendo una persona, con los mismos sentimientos y capacidades que
cualquier otra, entonces les dejo la pregunta a ustedes:
¿Cobrarle el doble por un asiento a una persona obesa es discriminación o un
acto justo?
martes, 4 de junio de 2013
Expectativa vs. Realidad: Viviendo la realidad de la expectativa.
Expectativa vs. Realidad
Viviendo la realidad
de la expectativa.
Es
una semana cualquiera en una escuela cualquiera. Sin embargo, es un día
especial: los estudiantes de años superiores ejecutan sus test de orientación
vocacional. Algunos futuros ingenieros hablan flores de esta profesión,
mientras algunos periodistas en potencia sueñan escribir editoriales en el
periódico de mayor tiraje en el país. Algunos indecisos no saben con certeza si
curar personas en medicina, o curar computadoras en alguna carrera como
Sistemas Informáticos. Todos hemos pasado por esto. Ahora, ¿cuántas veces estas
expectativas han estado a nuestra altura?
Desde
que se pone en movimiento un concepto en nuestra mente, es nuestra naturaleza
imaginar y tratar de predecir el progreso futuro de este pensamiento,
“planeamos”, por así decirlo, nuestra idea. Es innato del ser humano también
pensar positivamente; lo bien que nos ira si invertimos en tal cosa, lo bien
que seguramente nos vaya si realizamos tal actividad. Es verdad, el pesimismo
no es una de nuestras características, pero tal vez debería serlo. Volviendo a
nuestro ejemplo anterior, uno de esos mencionados estudiantes, muy brillante
por cierto, decide un día que quiere ser un ejemplar arquitecto. Todas las
personas a las que les confía este anhelo le comentan que en realidad no lo
veían por ese campo, pero esperan ver uno de sus diseños en algún lugar
importante en poco tiempo. Este acumulo de buenas intenciones hace que nuestro
estudiante eleve sus expectativas de lo que quiere por las nubes; tal vez las
cosas van a ser mas fáciles de lo que se espera.
Sorpresa,
mi querido amigo. Han pasado 4 años desde que nuestro estudiante se imagino con
su casco amarillo revisando la estructura de un colosal edificio, mientras sus
colegas lo admiran con respeto después de ser tan joven y eficiente. El
presente le ha tenido una realidad distinta: no se imagino lo que le venia.
Lucha con su carrera; no era lo que el pensaba. Sean cuales sean las razones
para el relativo fracaso de esta ficticia historia (será falsa, pero cuantos de
estos ejemplos llenan la nomina de las universidades actualmente), en realidad
pareciera que nació muerta. Las expectativas de nuestro amigo eran llegar a un
prado verde y recto sin fin, lo que encontró fue una montaña con piedras que
caen y ruedan llevándose todo a su paso.
En
la vida, no solo en el ámbito profesional, sino en general, tal vez sea hasta
prudente dejar un poco de espacio a la duda. Crecer lleno de altas expectativas
representa armar un castillo de naipes en el aire que tiene múltiples finales,
pero solo algunos son felices. En mi humilde opinión, las expectativas no deben
ser creadas desde un punto de vista imaginario y optimista; deben ser
trabajadas en el día a día y según dicte la realidad, pero sin dejar de apuntar
alto.
jueves, 16 de mayo de 2013
La Triste Realidad Del Fútbol En El Ecuador
Actualmente, en
nuestro país, las entidades deportivas funcionan únicamente a través de
mecenas, que hacen con las mismas lo que les plazca, aprovechándolas como
plataforma política, o simplemente como una manera fácil de hacer dinero.
En los últimos
días, todos nos hemos visto sorprendidos por como la “heroica” plantilla del
Deportivo Quito lucha por mantener los primeros lugares, pese a estar impagos
por más de 3 meses (el cuerpo técnico más de 7). Y anonadados por los terribles
resultados de las auditorias presentadas del Barcelona S.C., en donde se
refleja el atraco descarado que ha sufrido el club más popular del país.
Esto nos lleva a
preguntarnos, ¿Qué pasaría si el resto de equipos de fútbol profesional
realizaran auditorias?; ¿Qué sorpresas nos encontraríamos en dichos informes?
Lamentablemente esto nunca lo sabremos, ya que nadie las va a hacer, y si las
llegan a hacer los resultados serán mantenidos a la interna de los clubes para
no afectar el status quo de las dirigencias de turno.
La dirigencia de
la FEF, encabezada por el ingeniero Luis Chiriboga está respaldada por la época
de oro de la selección ecuatoriana, tapando fallos de gestión y administración
terribles, los cuales se reflejan en la precaria condición económica de los
clubes que conforman la FEF. Si existiría un manejo responsable y coherente de
la Federación, la misma debería contratar una empresa auditora externa para
realizar un saneamiento en todos los clubs, poniendo como sanción la desafiliación
inmediata de la misma para el equipo que se niegue o no facilite toda la
información necesaria. Con los resultados de estas auditorías, poner un plazo
máximo a los equipos para sanear sus administraciones, y si no cumplen con el
saneamiento, desafiliar a los mismos de la federación.
Hace falta una
legislación, tanto a nivel país como a nivel federación, más dura, que castigue
a quienes aprovechen “tácticas” ilegítimas para obtener resultados deportivos o
económicos propios. No es imposible, y no debería temblarles la mano, ya se vio
en Escocia, en donde gracias a una legislación apropiada, los malos manejos
financieros de los clubes se vieron castigados. El Rangers (club más ganador de
dicho país, y con más títulos locales, 54, de todo el mundo) tuvo que ser
refundado, y volver desde la división más baja de competencia.
Es inconcebible
que en el fútbol profesional exista un dopaje financiero tan intenso, como por
ejemplo, el caso del Deportivo Quito, el cual este año firmo contratos por más
de 40.000USD (dato no exacto) teniendo inmensas deudas por pagar y sin un plan
claro de distribución y manejo de fondos. Esto es agravado aun más por el hecho
de que los mencionados contratos no pueden ser cumplidos, teniendo deudas de
hasta 3 meses con CADA jugador, sin mencionar cuerpo técnico y medico,
empleados administrativos y divisiones formativas.
Como es posible
para clubes pequeños, que sin el respaldo de las grandes hinchadas o grupos de
poder, competir con semejante desventaja. No puede ser posible que un equipo
que no paga a sus jugadores y arrastra una inmensa deuda, haya ganado 3 de los
últimos 5 torneos (el cuarto de esos cinco títulos lo gana un equipo con vacíos
financieros enormes, que según su informe de auditoría, debe casi 3 millones a
Interagua, valor mayor al presupuesto ANUAL de un club de Primera Categoría B),
mientras que los que si cumplen sus contratos y obligaciones legales y
tributarias al día, tengan que pelear el descenso.
miércoles, 15 de mayo de 2013
el primer AS
Hoy empieza un nuevo proyecto, con un grupo de amigos, hemos decidido crear este blog de opinión en donde se encontraran distintos artículos de nuestra autoría (y tal vez, de vez en cuando, de la de alguien mas), que dejaran ver nuestro punto de vista frente a las distintas cosas que nos rodean en el mundo.
Aquí se podrá leer acerca de música, deportes, política, literatura, actualidad, tecnología entre muchísimas otras cosas, no queremos limitarnos. Principalmente nos centraremos en cosas de las que el resto no suele hablar, cosas que muchos olvidan o pasan por alto, sin embargo, buscaremos tener siempre una opinión formal y centrada frente a todo lo que sucede.
Saludos,
C.E.B.
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